En la ciudad de Umbral, donde los Fragmentos otorgan habilidades mágicas a los tiradores, la ladrona Liss se infiltra en la fortaleza de la corrupta Compañía de Garrik para robar un Fragmento de Sangre, un cristal legendario capaz de sanar cualquier enfermedad. Su objetivo es salvar a su hermana moribunda, pero su plan se ve frustrado cuando se cruza con Riven, un cazarrecompensas infame y maestro del revólver.
Atrapados entre los guardias y su despiadado líder, Garrik, ambos deberán unir fuerzas para escapar con vida. Enfrentando balas que curvan el espacio, escopetas que invocan sombras vivientes y su propia desconfianza mutua, Liss y Raven se verán obligados a decidir si son enemigos, aliados… o algo más.